top of page

Reportaje: Innovación e Identidad en Moda Sostenible

Cuando se piensa en moda se visualiza primero la marca que está impresa en la etiqueta que lleva el producto; lo segundo que se piensa es si el estilo de la prenda va acorde a nuestra personalidad o no como consumidores.


A la hora de comprar vestimentas observamos cuál es su precio, pero nadie se detiene a concentrarse en lo que hay detrás de algunas prendas, ya que tal vez sabiéndolo no las compraríamos. Entonces, ¿a nadie se le ha ocurrido pensar en cómo se fabrica su vestimenta preferida?, o preguntarse, ¿cómo logran las grandes empresas de moda producir masivamente?, ¿qué métodos utilizan?, ¿trabajan éticamente sus empleados?, ¿las prendas de estas compañías de renombre internacional son fabricadas por personas que ganan un salario adecuado?


Por todas estas preguntas sin aparente respuesta es que este reportaje estará basado en explicar el mundo oscuro detrás de algunas de nuestras marcas favoritas; sin embargo, antes de continuar es importante recalcar el significado de la moda sostenible.


Según Pauline Orbe; dueña y fundadora de la micro empresa “Pau-Line” ubicada en Guayaquil Ecuador, la moda sostenible es:


“Vestirse bien, con piezas que contaminen menos el planeta, tomando en cuenta que los constantes cambios de temporada la hicieron sentirse abrumada y prefirió recurrir a esta alternativa menos dañina..."

Micro empresa "Pau-Line". Foto contribución de Pauline Orbe.


¿ Para qué sirve este estilo de vida?


Pauline nos indicó que este estilo de vida sirve para crear menos impacto ambiental, preservar y mejorar la salud de la tierra. Ella asegura que el estilo es lo más importante que tiene una persona a la hora de vestir, sin estar delimitado por marcas; en esto se basa una moda sostenible.


¿De alguna manera su tienda busca concientizar a sus clientes?

Pauline nos cuenta que ella está creando conciencia sobre reutilizar piezas de ropa, y trata de crear hábitos saludables para el planeta al momento de vestir, pues reconoce que poco a poco su clientela ha crecido y por lo tanto debe enseñar a consumir sosteniblemente; cree firmemente que cuando se ama algo hay que cuidarlo y así también pone su granito de arena para cuidar a la naturaleza y el medio ambiente.


A partir del concepto de moda sostenible podemos saber qué es la moda ecológica, el comercio de la misma e incluso la

recuperación y reciclaje textil.

Cliente feliz de "Pau-Line". Foto contribución

de Pauline Orbe.


Muchas veces se menosprecia la ropa de segunda mano debido a los prejuicios que ha creado la sociedad. Según la modista Elena Moran, con experiencia de treinta años en la comercialización de prendas de este tipo dice que:


“En nuestro país las personas se limitan a usar ropa de segunda mano por falta de información de cuál es la procedencia de la prenda, pero actualmente se está implementando este tipo de estilo de vida en base al reciclaje de vestimentas, aunque es muy poco el uso de dichas vestiduras”

Además, de acuerdo a la opinión de sus consumidores, nos comenta que la ropa de segunda mano no es más que prendas pasadas de moda, amontonadas en un lado del clóset que ocupan espacio y se mantienen empolvadas sin darles un uso adecuado. Por otra parte, varios clientes le han dicho que les parece una buena idea reciclar la ropa, ya que ellos se deshacen de ropa acumulada y al mismo tiempo ganan dinero vendiendo algo que puede ser usado por otra persona.


A continuación hablaremos sobre el área textil, pero para esto debemos conocer el tema a través de una asesora guayaquileña de recursos humanos, llamada María de los Ángeles Cevallos quien es trabajadora de una empresa de producción de materia prima. A ella le preguntamos: ¿en qué condiciones laborales se encuentra un fabricante de textil a la hora de producir una pieza de ropa? Ella nos indicó que “existen diversas respuestas a esta pregunta, puesto que no todas las personas del mundo trabajan en la misma compañía, pero todos los trabajadores exigen condiciones laborales dignas.”


También nos mostró varios ejemplos de cómo el trabajador es abusado por el empleado: nos supo decir que en muchos casos los empresarios no contratan a las personas que velan por los derechos humanos ya que consideran que sus empleados trabajan en óptimas condiciones y no es necesario tener a una persona que escuchen sus “quejas”. Y podemos afirmar que el testimonio de la Sra. Maria de los Ángeles es cierto, con el ejemplo que se explicará a continuación.


En el país asiático, Bangladesh, ubicado al este de la India, fallecieron 1132 personas por el derrumbe del edificio Rana Plaza y las pocas personas que sobrevivieron a este suceso, como era de esperarse, se rehusaron a trabajar en dichas condiciones.


Los países asiáticos tienen la tasa más alta en donde abusan del trabajador, limitándolos de sueldos y horas de descanso.


Y por si no lo sabía, la mayoría de las prendas que usted tiene a su disposición provienen del medio oriente y Asia. Para la suerte de muchos trabajadores asiáticos el derrumbe logró captar el enfoque de empresas, gobiernos y organismos internacionales.


“La indignación social, amplificada por la extensa cobertura de los medios de comunicación, provocó que en cuestión de dos semanas 31 empresas internacionales firmaran el acuerdo para la seguridad en las fábricas y contra los incendios en Bangladesh”

Explica Eva Kreisler.



Trabajo en Bangladesh. Foto obtenida de la fuente m.europapress.es.


Desde ese entonces empresas privadas se han comprometido a firmar este compromiso que incluye inspecciones de seguridad independientes con informes públicos, creación de comités de seguridad y salud para las marcas que costearán las mejoras necesarias en las fábricas peligrosas y afrontar adecuadamente la seguridad contra incendios y los problemas estructurales.


Para culminar este reportaje explicaré un poco porqué la industria textil es dañina para la tierra y el medio ambiente.


Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU) confeccionar unos jeans requiere unos 7500 litros de agua, el equivalente a la cantidad de ese líquido vital que bebe una persona promedio en siete años.


Ese es sólo uno de los varios hallazgos alarmantes de un estudio ambiental reciente que revela que el costo de estar siempre a la moda es mucho más caro que el precio monetario que pagamos por ello.


Pese a las estadísticas desalentadoras, los productores y consumidores de moda están cada día más conscientes de que la industria necesita cambiar, y numerosas compañías, incluidas las minoristas de ventas masivas, empiezan a integrar los principios de sustentabilidad a sus estrategias de negocios.


Por ejemplo, la cadena global H & M ha adoptado un esquema de recolección de ropa y la fabricante de jeans Guess forma parte de un programa de reciclaje de guardarropa; mientras que la empresa Patagonia produce chamarras de poliéster obtenido de botellas recicladas.


En conclusión, la moda sostenible es lo mejor que ha podido pasar en estos tiempos y esta innovadora alternativa de la industria textil está creciendo a pasos agigantados en el mundo entero, creando así un gran impacto ambiental.


Elaborado por: Camila Orbe
Editado por: Sara Fariño  

60 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
Publicar: Blog2_Post
bottom of page